Home / Antofagasta / Noticias

Desierto de Atacama: un laboratorio natural propicio para el estudio de la astronomía y la geología

383639_atakama_pustynya_chili_nebo_noch_zvezdy_magellanov_4146x2758_(www.GdeFon.ru)
  • 30 Noviembre, 2020

La Región de Antofagasta destaca a nivel global por sus cielos limpios y la gran presencia de minerales, consideradas cualidades únicas para la investigación de ambas ciencias. 

El desierto de Atacama, en la Región de Antofagasta, posee cualidades únicas y sorprendentes que lo convierten en un laboratorio natural propicio para el estudio y la investigación de la astronomía y la geología.

De hecho, este territorio destaca a nivel mundial por sus cielos limpios, ideales para la observación astronómica, así como por su tierra, debido a la gran presencia de minerales como el cobre y el litio, entre otros muchos atributos para la investigación de ambas ciencias.

El astrónomo de la Universidad de Chile (UCh), investigador del Centro de Excelencia en Astrofísica y Tecnologías Afines (CATA), y Premio Nacional de Ciencias Exactas (1999), Dr. José Maza, destacó el rol fundamental que tiene la Región de Antofagasta como sitio para estudiar la astronomía.

“Los cielos del desierto de Atacama son de lo mejor que la naturaleza nos ha entregado para realizar la investigación del cosmos”, afirmó el astrónomo, que participó en el conversatorio online “Explorando el cielo y la tierra en la Región de Antofagasta”; en el marco de la actividad “Astrogeo” del PAR Explora Antofagasta, del Ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación, ejecutado por la Universidad Católica del Norte (UCN).

“El número de descubrimientos que nos han entregado a la humanidad los telescopios del norte de Chile son innumerables. Los años venideros traerán hallazgos que revolucionarán nuestra comprensión del universo, y los astrónomos de nuestro país estamos llamados a protagonizarlos y liderarlos”, añadió el científico.

ESTUDIO DEL CIELO Y LA TIERRA

El Dr. Maza dijo que la astronomía es una ciencia muy atractiva, sobre todo para las nuevas generaciones. “La Región de Antofagasta es privilegiada por sus cielos, que permiten resaltar la belleza del cosmos. Espero sinceramente que los próximos años la región pueda salir más al mundo de lo que ya está saliendo, porque es necesario mostrar que esa parte de Chile es la verdadera ventana de la humanidad al universo”, opinó.

La geóloga y académica del Departamento de Ciencias Geológicas de la UCN, Dra. Millarca Valenzuela, quien también participó como expositora en el conversatorio “Explorando el cielo y la tierra en la Región de Antofagasta”, comentó que el desierto de Atacama es un lugar único en el mundo, explicando que se trata del más árido y antiguo a nivel global.

“Tiene (el desierto de Atacama) la particularidad de tener dos cordilleras: la cordillera de la costa, que bloquea la humedad que viene del Pacífico; y la cordillera de los Andes, que impide la humedad que viene del Atlántico. Entonces, tenemos un centro que genera las condiciones ideales para mantener esta hiperaridez, que tiene muchas repercusiones en varios tópicos, como por ejemplo, en un momento de la historia geológica de este territorio, se genera el bloqueo de ciertos enriquecimientos que se provocaron en rocas mineralizadas, que han generado una concentración anómala alta de metales como el cobre, el molibdeno y otros, que han contribuido de alguna forma a la economía durante años”, detalló.

La científica dijo que la geología es una ciencia que estudia principalmente las rocas de la corteza terrestre, para tratar de entender sus procesos y, por lo tanto, se puede investigar en cualquier lugar de la Tierra.

“Justamente por las condiciones que tiene el desierto y la ausencia de vegetación y de condiciones en las cuales las rocas se erosionan y se transforman, el desierto permite preservar como una fotografía instantánea algunas rocas muy antiguas que nos permiten mirar esta historia de la Tierra, en un rango más grande de tiempo, con diferentes procesos. En ese sentido, la geología queda más expuesta en un lugar como la Región de Antofagasta, en general el norte de Chile”, complementó.

Respecto a la minería, que ha posibilitado la presencia de numerosas empresas mineras y el desarrollo económico de Chile, la científica explicó que precisamente el desierto de Atacama posee concentraciones especiales de minerales, producto de las condiciones de aridez. “Y además de las condiciones tectónicas que permitieron generar estos magmas enriquecidos en metales”, añadió.

CONEXIÓN ENTRE AMBAS CIENCIAS

Entre la astronomía y la geología existe una enorme conexión, teniendo en cuenta que la primera estudia el universo y la segunda el planeta Tierra, que precisamente es parte de ese universo. La Dra. Valenzuela expresó que desde la geología se puede aportar con información relevante para la investigación astronómica.

“Por un lado, está la información que podemos aportar desde el conocimiento de las rocas terrestres; pero en mi caso, que estudio meteoritos, además podemos aportar en entender estos primeros procesos de formación planetaria, que entrega información muy valiosa, ya que con los meteoritos podemos hacer análisis químicos, tomar edades radiométricas, dataciones de diferentes métodos isotópicos, con lo cual vamos poniendo tiempo a diferentes procesos”, explicó.

A su vez, la experta argumentó que el conocimiento de la Tierra, gracias a la geología, contribuye al arduo trabajo de la astronomía en la búsqueda de evidencia de vida extraterrestre.

“Podemos entregar una visión acerca de cómo la Tierra, con todas las características que tiene, puede generar los nichos para la generación de vida en un planeta, que es lo que los astrónomos actualmente están buscando, utilizando para eso estudios de exoplanetas. En ese contexto, la geología aporta a entender las condiciones más favorables para la generación de vida, pero también para que ésta evolucione a organismos más complejos como los animales”, señaló.

En tanto, respecto a la posible vida extraterrestre, el Dr. Maza afirmó: “Tan sólo en la vía Láctea habrían 100 mil millones de planetas como la Tierra, donde potencialmente se podría haber formado la vida. Yo encuentro que es muy poco probable que este sea el único planeta (la Tierra) donde se formó la vida”.

ETIQUETAS:

COMPARTE: