Educadoras de la Región que han desarrollado durante el año el Programa PIPE, destacan el trabajo y los conocimientos que han entregado a sus párvulos, en especial al conocer y valorar el entorno natural.
El Programa de Indagación para Primeras Edades (PIPE), busca fortalecer las competencias científicas de los equipos pedagógicos de educación parvularia y desarrollar en niños y niñas las competencias necesarias para que conozcan y comprendan el mundo que los rodea.
“La experiencia PIPE ha sido una oportunidad fantástica para poder sumergirse en el mundo científico, y lo digo tanto por los adultos como por los párvulos”, destaca Scarlett Muranda, de la Escuela Santa Bernardita de Monte Patria, en el trabajo que ha realizado a lo largo de este segundo semestre.
Scarlett nos muestra parte de los implementos que usó en el módulo
Por medio de dos módulos (plantas y animales), las educadoras traspasan conocimientos científicos y que favorecen la indagación de los párvulos, permitiendo que puedan ir logrando descubrimientos del entorno que les rodea.
Durante las últimas semanas, las educadoras de diversos rincones de la Región de Coquimbo trabajaron con las experiencias científicas asociadas al módulo plantas, que busca relevar la importancia de estos seres vivos, planteándose preguntas como ¿qué son las plantas? ¿cuáles y qué hacen las partes de las plantas? O posibilitar que recorran su espacio más cercano para conocerlas, y saber de sus frutos o semillas, entre otras actividades.
“El módulo planta ha sido ideal para adquirir herramientas, para entregar a los párvulos y mostrarles la real importancia que se le debe tener al cuidado del medio ambiente”, explica Marta Vejares, educadora del Jardín Infantil Matilde Salamanca de la comuna minera.
Por otra parte, estas actividades han permitido aprender nuevos conceptos, tal como explica Evelyn Ocaranza, educadora del Jardín Infantil Los Grillitos de Coquimbo, “lo que más destaco es que en conjunto con el grupo de niños y niñas hemos adquirido nuevos conceptos, además palabras nuevas que no estaban en nuestro vocablo y eso ha enriquecido nuestro lenguaje como educadoras”.
En estos días, las profesionales ya comenzaron a trabajar con el módulo de animales y cada una espera que sea una gran oportunidad el ser parte de esta nueva experiencia, “El módulo de animales será un desafío de cómo llegar a los niños el cuidado y protección tantos por los animales y en el medio que están insertos, lo encuentro fundamental entregar estos aprendizajes y que sean significativos para ellos también”, reflexiona Marta.
En cuanto a los planes futuros, luego de ser parte de esta iniciativa científica y aplicar los conocimientos aprendidos con las nuevas generaciones, Evelyn nos cuenta que “considero que los desafíos son mejoras para nuestra carrera y estas se pueden acoger a cada vivencia del día a día”. Similar opinión tiene Scarlett, al afirmar que “el mayor desafío es nunca dejar de aprender y tratar siempre de dar lo mejor en cada área que se nos presente. En cuanto a lo científico ya quedó claro que depende de nosotros los educadores de educación parvularia abrir las puertas a lo científico, ya sea desde una experiencia de exploración hasta una de experimentación”.
El 24 de noviembre será el encuentro de cierre del módulo animales, en donde las veintiséis educadoras que son parte de PIPE en la Región de Coquimbo, podrán socializar todo lo aprendido y vivido en estas semanas.
