La educación a distancia a través de plataformas de internet ha sido uno de los desafíos que profesores y profesoras han debido superar tras el distanciamiento social obligado por la pandemia, , sin embargo existen instancias generadas a partir de esta adversidad, que han permitido mantener motivados a los y las estudiantes en continuar trabajando su curiosidad por la ciencia, como es el caso del Congreso Regional Escolar de Ciencia y Tecnología realizado por primera vez en formato online, organizado por el Proyecto Explora Región Metropolitana Norte.

La actual pandemia por COVID-19 ha sido un desafío para el mundo, obligando a muchos países entre ellos a Chile a aplicar medidas extremas de prevención, como es el distanciamiento social y cuarentenas, haciendo que millones de personas permanezcan en sus hogares por largos períodos de tiempo largo.

Los y las estudiantes no se escaparon de esta realidad, sus estudios también se vieron afectados por esta medida, ya que desde marzo las clases presenciales en todo el país fueron suspendidas. Sin embargo, para que no sean interrumpidas en su totalidad, las autoridades han fomentado la educación a distancia a través de plataformas digitales, trayendo consigo tantos pros como contras.

La conectividad entre las personas que se encuentran distantes han sido posibles gracias al internet, pero según los  datos publicados en la Hoja de Ruta para la Cooperación Digital de la UNESCO, solo 53,6% de la población del mundo hoy en día tiene acceso a internet, dejando por lo menos 3,6 billones de personas sin conexión. En muchos países incluyendo a Chile, el internet debe ser financiado como parte del presupuesto del hogar, por lo que es un desafío para los gobiernos. Sin embargo, como nos cuenta los profesores Carlos Trapp y Marlys Jara también existen otros obstáculos para la educación, más allá de la entrega de las materias propias del curriculum escolar.

El desafío de la educación a distancia

Para Carlos Trapp, profesor del Liceo Manuel Barros Borgoño, dentro de la complejidad  de impartir educación a distancia es importante tener en cuenta el hecho de que los grupos humanos son diversos en sus características personales, formas de aprendizaje, habilidades, condiciones económicas, acceso a la información, cultura y diferencias que en un contexto de Liceo Público son más profundas, “hoy nuestros estudiantes inmersos en sus propias realidades, no sólo no están aprendiendo lo que otro estudiante sí, sino que además se profundizan las distancias y posibilidades de desarrollo intelectual y cultural, generándoles un vacío en su formación académica. Esta pandemia hace profundiza las diferencias sociales, ya que esta sociedad ha estado fundada en la desigualdad”.

“Cuando se hacen clases presenciales no sólo se está enseñando la materia, sino que también se generan vínculos con los y las estudiantes, los cuales no se logran a través de una pantalla” nos cuenta Marlys Jara, profesora del Liceo Siete de Providencia con respecto a las clases a distancia.

La educación a distancia en si misma instala un desafío, comenta Marlys Jara, profesora del Liceo Siete de Providencia Luisa Saavedra  “cuando se hacen clases presenciales no sólo se está enseñando la materia, sino que también se generan vínculos con los y las estudiantes, los cuales no se logran a través de una pantalla, además también es complicado hacer un seguimiento efectivo de los progresos y dificultades que va teniendo cada alumno y alumna, ya que es muy difícil que lo puedan expresar a través de una video llamada”.

 

 

Al respecto, Carlos también indica que  “hacer clases a través  de plataformas virtuales, correos o grupos de WhatsApp ya existían, pero nunca habían tenido tanto protagonismo en la educación, debido a que desarrollar mayor empatía con los estudiantes a la distancia es un proceso complejo” además agrega “el hecho de que los estudiantes vivan la experiencia del aprendizaje colectivo, estén en contacto en sus espacios de aprendizaje, con sus redes de protección y de contención afectiva, como son sus compañeros y amigos, irremplazables”.

XIV Congreso Regional Escolar de Ciencia y Tecnología a través de una plataforma online

En Chile se han implementado una serie de iniciativas para no interrumpir los procesos de aprendizaje y acompañar a los niños en casa durante esta pandemia. Tal es el caso del XIV Congreso Regional Escolar de la Ciencia y Tecnología (CRECYT) organizada por el Proyecto Explora Región Metropolitana Norte del el Ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación, evento realizados desde el 30 de julio hasta el 10 de agosto. La iniciativa reunió 20 proyectos de investigación escolar, realizados por estudiantes de diferentes colegios de la región metropolitana.

Marlys y Carlos junto con sus estudiantes participaron en este congreso, quienes mediante la exposición de videos y material gráfico pudieron mostrar sus proyectos científicos escolares realizados el año 2019, los cuales por la contingencia social y luego la pandemia no pudieron ser presentados de forma presencial.

“Llevar a cabo este proceso de manera remota es absolutamente novedoso y nos permite aprender otras formas de comunicación antes no consideradas, las cuales debemos mantener y complementar en un futuro sin pandemia” nos cuenta Carlos Trapp, profesor del Liceo Manuel Barros Borgoño con respecto al Congreso Escolar online.

Para Carlos, los Congresos Explora siempre han sido una gran experiencia tanto para él como para sus estudiantes ya que les permite salir de la lógica de sus planes y programas de estudio, para desarrollar actividades de profundo interés, construyendo de manera voluntaria sus conocimientos. “Llevar a cabo este proceso de manera remota, es absolutamente novedoso y nos permite aprender de formas de comunicación antes no consideradas, las cuales debemos mantener y complementarlas en un futuro sin pandemia, sin embargo nos queda muy claro que la realidad que devenga no será en absoluto igual a la realidad que existía antes de la pandemia, como nos decía el viejo Heráclito, “Nadie se baña dos veces en el mismo río”” concluyó.

Para Marlys, la experiencia ha sido positiva pero muy distinta a lo que estaba acostumbrada, indicando “por mi parte me gusta pasear por los posters y observar las investigaciones escuchando lo que otras personas dicen, lo que en la instancia online no ocurre, además en este tipo de actividades entre los estudiantes normalmente se genera mucha amistad, compartiendo su Instagram, números celulares…algo que no ocurrirá ahora. De todas formas se agradece tener la oportunidad de poder finalizar el proceso que quedo pendiente en el 2019, además todas las iniciativas que ayuden a la difusión de la ciencia y sobre todo en el ámbito escolar, no sólo son un aporte para los y las estudiantes que están exponiendo sino que son acciones motivadoras para las  generaciones posteriores, quienes van observando que hay muchas personas que se interesan en escuchar sus proyectos científicos, finalizó la profesora.