La estudiante de magíster en física, Valeska Zambra inició a muy temprana edad su carrera como científica. Desde los doce años está ligada a la investigación, cuando mediante el programa Explora comenzó su trabajo vinculado a la astronomía en Atacama. Hoy su foco está en el micro mundo, todo gracias a su amor por la luz y la ciencia, un conocimiento que busca compartir con la comunidad.
“Promesas dentro de un cristal”, es el título del primer EP de la banda capitalina Paisaje Sónico. En su portada, una bella imagen –que bien parecería un papel mural decorativo– es en realidad el resultado de un experimento en el laboratorio del Instituto Milenio de Investigación en Óptica de la U. De Chile. La autora de la imagen es la física Valeska Zambra. Por esta imagen, a sus 25 años ya puede decir que recibió una mención honrosa en el concurso de fotografía científica más importante del mundo, organizado por la Royal Society de Londres, donde pasaron científicos de la talla de Isaac Newton, Stephen Hawking y Michel Faraday.
“Es súper loco que uno parte haciendo algo y termina en cosas inesperadas que son muy buenas”, nos cuenta la estudiante de magíster, quien inició su acercamiento a la ciencia desde muy temprano, cuando su madre la llevaba a clases siendo apenas una bebé. “Mi mamá es química y cuando me tuvo, aún estaba en la universidad. Entonces me llevaba a las clases, y ahí yo fui conociendo de ese mundo científico. Se me empezó a cultivar la curiosidad”, nos comenta sobre su primer encuentro con las ciencias.
Pero no fue sino hasta séptimo básico que ingresó de lleno a trabajar con el método científico.
-Cuéntame cómo se inicia tu carrera de investigadora escolar
-En séptimo básico entré a la academia de ciencias de mi colegio con la profesora Ana García, esto en el Liceo Sagrado Corazón de Copiapó. Ahí todo cambió para mí porque recuerdo muy bien que la primera salida a terreno que tuvimos fue al cerro Venado Norte de Atacama, con la Sociedad Astronómica Orión. Allí se veían todas las estrellas muy nítidas y muy encima. Se veían tan cerca que daba la sensación de que las iba a poder tocar. Eso me emocinó y me apasionó mucho. Ahí yo dije ‘esto es lo mío, me gusta mucho y quiero ser científica’.
Ese primer club de ciencia tenía un nombre muy especial: Aytiwi, que en aymara quiere decir relave. De ahí Valeska viajó a Punta Arenas, donde participó de un Congreso Nacional de Ciencias y Tecnología Explora CONICYT. “Fue muy emocionante irse desde Copiapó hasta allá. Era primera vez que me subía a un avión, y llegar allá fue impactante y muy bonito. Era sorprendente conocer científicos y otras personas de mi edad que también tenían el interés por la ciencia y que hasta el día de hoy son mis amigos”, nos cuenta la joven científica. Después de esta experiencia, Valeska fue parte de otros tres clubes con diversas investigaciones, lo cual le hizo recibir el premio Naturalista Ernesto Gigoux a la investigación científica escolar entregado por Explora en la Región de Atacama.
“En Chile uno piensa que quizás la ciencia está botada, que no se está haciendo tanto, y que la gente está desmotivada con el tema, pero al conocer más personas te das cuenta que no, que son muchos, y que los jóvenes están haciendo el cambio”.
-No solo has participado de eventos nacionales, cuéntame sobre tus participaciones en el extranjero siendo aún estudiante de enseñanza media.
-El 2010 se me ocurrió hacer una investigación sobre las estrellas con exoplanetas visibles desde Copiapó. La presenté en el nacional de astronomía y gané. Gracias a ella fui a representar a Chile en Paraguay, para un certamen internacional de ciencia escolar a los 16 años. Allá obtuve el segundo lugar. Con todo el conocimiento que se generó para la investigación se dio la posibilidad de crear un software de enseñanza de astronomía para el cual me apoyó la minera Atacama Kozan, para así poder hacer llegar a la gente los distintos tipos de conocimientos que genera la ciencia. Yo siempre he pensado que nosotros tenemos un rol como científicos hacia la sociedad, en el cual tenemos que hacer llegar a la gente la ciencia, y no solo la del pasado, que es la básica, sino también la de hoy en día, ojalá de forma lúdica.
-¿Son un semillero para científicos los congresos escolares?
¡Sí, absolutamente! El hecho de no solo hablar de ciencias, sino también de otras cosas en estos congresos, incentiva a la interacción humana y a que se armen grupos. Bueno, puedes estar en una fiesta y alguien saca el tema de la ciencia y pueden ser colaboradores después. En Chile uno piensa que quizás la ciencia está botada, que no se está haciendo tanto, y que la gente está desmotivada con el tema, pero al conocer más personas te das cuenta que no, que son muchos, y que los jóvenes están haciendo el cambio.
-Cuando hablas del rol de los científicos con la comunidad, ¿Cómo entiendes la reciprocidad de entregar conocimiento a la sociedad de los investigadores?
Siempre he pensado que nosotros como científicos tenemos un rol con la sociedad muy importante. Yo hago divulgación científica desde el 2013. Es por devolver la mano. A mí me dieron la oportunidad de recibir actividades que me motivaron a seguir en esto.
El universo en un microscopio
Valeska se dedica a su trabajo de investigación científica en laboratorios. Si bien el inicio de su trayectoria estuvo marcado por la astronomía, hoy su foco está en examinar partículas y moléculas. Un cambio de interés que se dio tras realizar una práctica en el laboratorio de Fenómenos Robustos en Óptica con el Dr. Marcel Clerc en la Universidad de Chile.
“De una manera muy lúdica trató de convencerme e incentivarme de que estudiar lo micro en el laboratorio era como estudiar el universo, que es como un análogo. Y bueno, es más factible manipular las cosas que con lo macro. Siempre me gustó mucho la luz, la física y me empecé a interesar más por los cristales líquidos”, cuenta Zambra.
Estos cristales líquidos son importantísimos de las tecnologías para el futuro y también son una ralidad muy cercana. Gracias a ellos estás leyendo esta nota. “Pantallas de televisores, celulares y computadores tienen cristales líquidos”, explica.
-¿Qué es un cristal líquido?
-El cristal líquido es un estado de la materia. En él las moléculas son alargadas y tienen tanto propiedades de un sólido cristalino como de un líquido. La particularidad que tienen es que son más desordenados que un sólido cristalino, pero más ordenado que un líquido y pueden fluir. En el caso de pantallas, a las moléculas se les aplica voltaje para que cambien su orientación. Según cuánto se inclinen las moléculas dejan pasar ciertos colores de luz. Así la electricidad hace que aparezcan imágenes hechas con la modificación de estructuras que dejan pasar tal o cual luz.
-¿Qué aplicaciones podrían tener?
-Lo interesante de esto es que va a tener muchas aplicaciones para el futuro. Mezclar la materia y la luz es una herramienta muy poderosa, por cuanto ya se están desarrollando ventanas inteligentes que tienen cristal líquido en el cual las moléculas se orientan dejando pasar cierto tipo de luz dependiendo de la hora del día, según si hace frío o calor. También se están desarrollando pantallas nuevas, encriptación de información, microprocesadores, y esto requiere de un estudio fundamental de la física que hay detrás.
-Cuéntanos del experimento que realizaste en esta materia y que te valió el premio en la Royal Society.
-Bueno, una de las gracias de los cristales líquidos es que forman vórtices con distintas estructuras, se aniquilan entre sí y tienen una cierta dinámica. En el verano pasado estuve haciendo muchos videos de mi experimento en el laboratorio y entre esos capté una imagen muy bonita que luego mostré a mis compañeros. Ellos me aconsejaron que la enviara a la competencia de fotografía científica de la Royal Society en Inglaterra. En verdad nunca pensé que iba a salir con una distinción porque ahí postulan más de mil fotografías. Fue una sorpresa, pero a mí el sentimiento que me ha atraído durante toda la vida, es que cuando tú haces lo que te apasiona sin esperar una retribución a cambio, simplemente trabajando duro en ello, uno nunca sabe en lo que va a terminar y es bueno, y fue así que después me llegó una notificación de que mi imagen salió distinguida entre las 10 mejores imágenes en la categoría microscópica.
Hoy Valeska ha sido postulada a los premios “Chileno del Año”, por su trayectoria científica y trabajo en divulgación. Entre sus planes están el seguir llevando el mensaje de la ciencia a los colegios y cambiar estereotipos de la sociedad relacionados con la ciencia. Su mensaje para quienes quieran hacer ciencia es claro y lo lleva a cada colegio donde participa como expositora: “Lo importante es que hagan lo que les gusta, que se dediquen a hacer lo que les gusta y si le dicen cosas como ‘no ganan tanta plata’ o que ‘no van a encontrar trabajo’, la verdad es que, si uno trabaja duro en lo que le gusta, las cosas no van a salir mal. Mi mensaje es que hagan lo que les gusta, independiente de si les gusta la ciencia u otra cosa”.
